Desde hace varios años se vienen celebrando anualmente en varias ciudades españolas los llamados festivales aéreos, consistentes en el desfile de unidades del ejército del aire, la marina, el cuerpo de paracaidistas, así como pilotos civiles de acrobacias y unidades de bomberos y salvamento. En las últimas ediciones algunas ciudades han cancelado la celebración del Festival, pero otras, como Gijón, Málaga, Cádiz y Barcelona continúan organizando este tipo de eventos, presentándolos ante la ciudadanía como atracción turística, cuando son en realidad actos de propaganda de los ejércitos y las fuerzas militares para mejorar su imagen pública y disminuir la percepción negativa que de ellos tiene la sociedad.
El gasto militar por habitante y año en 2012 fue de 368 €, frente a los 32 euros por habitante y año que se destinan a ayuda al desarrollo
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